El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, presentó ante la Cámara de Representantes el proyecto de ley de financiamiento, mejor conocido como la nueva reforma tributaria, con el objetivo de recaudar 12 billones de pesos.
Estos fondos se destinarán a cubrir el presupuesto nacional del 2025 del cual aún no se ha definido el monto. Este nuevo proyecto se sumaría a las 12 reformas tributarias que ha tenido el país en las últimas dos décadas, reflejando la continua búsqueda de equilibrio en las finanzas públicas.
A pesar de su importancia, la propuesta ha generado diversas reacciones en el Congreso y entre los sectores económicos. Efraín Cepeda, presidente del Congreso, advirtió que la reforma podría no obtener el respaldo necesario en su forma actual, debido a las críticas recibidas, especialmente por parte del sector empresarial y expertos en economía.
Principales cambios de la reforma tributaria 2024
La reforma tributaria propone una serie de modificaciones e introducción de nuevos impuestos que afectarán tanto a personas naturales como a empresas. Entre los puntos más discutidos se encuentra la reducción del umbral del impuesto al patrimonio, que pasaría de 72.000 UVT (3.368 millones de pesos) a 40.000 UVT (1.883 millones de pesos). Esto afectaría a más contribuyentes, aumentando la base gravable a 75.341 personas en Colombia, especialmente aquellas con altos ingresos.
Otra modificación importante es la aplicación del IVA del 19% a productos y servicios previamente exentos o con tarifas reducidas, como los vehículos híbridos, Airbnb y juegos de azar en línea. No obstante, los proyectos de energías renovables seguirán exentos de este impuesto, como incentivo al desarrollo sostenible.
Impacto en combustibles y retenciones
Uno de los aspectos más controversiales de la reforma es el aumento en el impuesto al carbono, que afectará el precio de combustibles como la gasolina, el diésel y el combustible para aviones. Este incremento generaría un aumento en los costos del transporte y los tiquetes aéreos, lo que ha provocado preocupación en diversos sectores. A pesar de esto, zonas apartadas como el Amazonas, Caquetá y Vichada estarán exentas de este impuesto.
Además, el proyecto plantea un aumento en la retención en la fuente para aquellos trabajadores con ingresos superiores a 9,02 millones de pesos mensuales, elevando la tarifa del 39% al 41%. Esta medida afectará principalmente a personas con salarios más altos, generando una mayor retención en sus ingresos mensuales.