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“Así fue, débil (…) no logró llenar la Plaza de Bolívar de Bogotá”: Petro demerita las marchas contra su Gobierno

Aunque este martes, 20 de junio, las calles de las principales ciudades del país se vieron abarrotadas por las multitudinarias marchas que convocó la oposición ante el descontento generalizado que se siente con el Gobierno, el presidente Gustavo Petro no admitió que perdió el pulso en las calles y, por el contrario, aseguró que las manifestaciones en contra de su mandato fueron “débiles”, tanto que, según él no lograron llenar la emblemática Plaza de Bolívar de Bogotá.

“Así fue, débil en la costa Caribe, débil en la costa Pacífica; no logró llenar la Plaza de Bolívar de Bogotá, y fue fuerte como siempre en Medellín y Santanderes”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.

Y es que la “Marcha de las mayorías” del martes que fue promovida por sectores políticos contradictores a Petro y a la que también se unieron otros sectores inconformes con lo que ocurre en la Casa de Nariño, congregó a cerca de 92 mil personas, según cifras de la Policía, en todo el territorio nacional, muy por encima de los apenas 16.000 convocados por el mandatario el pasado 7 de junio cuando invitó a la gente a marchar a favor de su Gobierno.

La jornada de este 20 de junio tuvo una masiva participación en cerca de 15 ciudades del país y otras 10 en el extranjero. En todas las consignas era la misma: expresar el descontento que existen con las reformas promovidas por el Gobierno Petro (salud, pensional, laboral –que se hundió este mismo martes –), además de rechazar los diálogos con el ELN y los acuerdos con bandas como el Clan del Golfo.

Las marchas transcurrieron pacíficamente y, contrario a lo expresado por el presidente Petro, en la capital del país sí se llenó la Plaza de Bolívar, como quedó registrado en diferentes fotos y videos compartidos en redes sociales y por los medios que cubrían la manifestación. Pese a que se negó a admitir la fuerza general de las marchas, el mandatario sí reconoció que en ciudades como Medellín las marchas tuvieron una alta concurrencia. Y es que en la capital antioqueña un río de gente –entre 35.000 y 40.000 personas– marchó a lo largo de la Avenida Oriental, aunque el alcalde Daniel Quintero intentó minimizar el efecto, y hasta burlarse de quienes se manifestaban en las calles.

Durante la jornada, el presidente solo se limitó a decir que el deber del Gobierno era cuidar las formas de protesta de la ciudadanía “y que no pase nada con ningún manifestante. Esa es la expresión del talante democrático: que se puedan expresar como quieran, siempre que se respeten los derechos”.

Tomado de: El Colombiano

 

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