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Nutrición: 5 claves para comer feliz y no preocuparse en el intento

Nutrición: 5 claves para comer feliz y no preocuparse en el intento

Nutrición: 5 claves para comer feliz y no preocuparse en el intento

La relación entre la comida y la mente es fuerte. Algunos estudios sugieren que una buena dieta puede significar un mejor estado de ánimo. La conexión entre la dieta y el bienestar emocional es una área de investigación que ha ganado interés en los últimos años, y los resultados respaldan la idea de que lo que comemos puede afectar nuestra salud mental en general.

De acuerdo con expertos, alimentos naturales, nutritivos y balanceados son los que mejor rendimiento darán al cuerpo humano. Mientras que las comidas con ultraprocesados, con altos niveles de azúcar, químicos y grasas saturas, reducen el rendimiento del mismo.

La doctora Alicia Cleves Huergo, nutricionista dietista adscrita a Colsanitas y directora del Centro de Nutrición y Medicina Integral para el Control y Reducción de Peso en Bogotá, comenta que “una alimentación saludable es fundamental para incrementar los niveles de serotonina y endorfinas, neurotransmisores que repercuten directamente en el estado de ánimo y son conocidas como las hormonas de la felicidad”.

Cleves también añade que para mantener a diario los ánimos, es necesario llevar un buen estilo de vida, haciendo ejercicio frecuentemente, ya que el cuerpo producirá endorfinas que lo hará sentir mejor, tomar agua y se puede intentar ejercicios de respiración que reducirán el estrés y la ansiedad.

Adicionalmente, la experta comparte 5 recomendaciones claves para mantener la alegría al comer:

Nutrición: 5 claves para comer feliz y no preocuparse en el intento

1. Evitar el exceso de azúcar: Las comidas con altos niveles de azúcar, como el helado, galletas, postres y más, suben el ánimo rápidamente, pero muchas veces se nos olvida que después de la subida hay una bajada. El bajón emocional que eventualmente produce el azúcar es resultado de los cambios de insulina en la sangre como reacción al azúcar.

2. Evitar las grasas y alimentos procesados: La comida frita, los panes, y hasta los alimentos ultraprocesados, darán una peor sensación. Puede perder hasta sueño, ya que estas comidas ralentizan la digestión y te causan pesadez e irritación.

3. Evitar los estimulantes: Si el cuerpo está dando señales como sueño o cansancio, ¡escúchelo! No trate de luchar contra su cuerpo usando café, bebidas energizantes o hasta vino. Estos subirán los niveles de cortisol que sube fuertemente los niveles del estrés.

4. Aumente el nivel de proteína y calcio en sus alimentos: puede mezclar sus alimentos con el pavo, el pollo y el atún enlatado, que son proteínas magras de origen animal. Por su parte, la leche de vaca es una buena fuente de calcio, ya que tiene alta concentración de triptófano. Una buena alternativa es la avena, puesto que cuenta con antioxidantes, reduce la inflamación del cuerpo.

5. Incluya nuevos alimentos: los frutos secos y semillas son una excelente opción porque tienen una alta concentración de triptófano por porción, esta también es una excelente fuente de proteínas, grasas buenas, vitaminas y minerales.

Por otro lado, las frutas como el banano, la manzana, las uvas pasas y frutos rojos (fresas y frambuesas), los vegetales como el brócoli, la solla y las arvejas tienen una muy buena cantidad de fibra, magnesio, y vitamina B y se deben incluir en las dietas, pues son importantes para el cerebro en las funciones nerviosa y cognitiva.

Aunque son varios los estudios que sugieren una conexión entre la dieta y el estado de ánimo, es importante tener en cuenta que cada persona es única, y los factores que influyen en el bienestar emocional pueden ser diversos y multifacéticos. La dieta es solo uno de los muchos factores que pueden influir en el estado de ánimo y la salud mental.

Nutrición: 5 claves para comer feliz y no preocuparse en el intento

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