Bogotá. El médico forense Francisco José Calle, quien realizó la necropsia al cuerpo de Javier Ordóñez, explicó en audiencia de juicio disciplinario ante la Procuraduría, que la muerte del taxista se produjo por una hemorragia interna, producida por el estallido de uno de sus riñones.
El médico forense explicó que ese tipo de muertes no son frecuentes, pero que se da porque el trauma se produce directamente al abdomen y con profundidad.
El médico advirtió que el estallido de un riñón se puede producir por una patada con suficiente fuerza y no por los punzones de un arma taser, que normalmente son superficiales.
Así mismo, el experto en ese tipo de casos aclaró que la víctima no pudo causarse ese tipo de traumas. <<Los traumas fueron profundos y bastante introducidos hacia la cavidad abdominal (…) no pudieron haber sido autoinfligidos, porque le alcanza a una personas obtener esa alta energía para que se estalle el riñón>> indicó.
El médico dijo que la víctima perdió por lo menos 3.500 centímetros cúbicos de sangre que circulaba por sus órganos, lo que llevó a la perdida de circulación y falta de oxígeno a los órganos del cuerpo.
<<Al perderse deja de cumplir el propósito o la función en el organismo humano, que es oxigenar los órganos, llevar productos del metabolismo y sacar del metabolismo los desechos. Eso tiene implicaciones fisiológicas, al no haber suficiente sangre las funciones son alteradas, se pierden por completo>>explicó el médico forense.
Al leer el informe de necropsia, el experto forense dijo que se encontraron unos ocho u diez traumas en todo el cuerpo de la víctima, que podrían ser compatibles con el arma taser.
El médico sostuvo además que se encontraron lesiones con ese tipo de arma cerca al ombligo, debajo de una de las costillas, en la espalda, en la región lumbar al lado derecho y cerca al glúteo.
<<Lo principal acá y la causa de muerte que se determinó es debido a los traumas múltiples de localización abdominal>>apuntó.
Tomada de RCNRADIO.