En psicología: la autoestima es la percepción emocional que las personas tiene de sí mismas. Puede expresarse como el amor hacia uno mismo.
La percepción emocional puede fácilmente llegar a sobrepasar en sus causas a la racionalidad y la lógica del individuo.
Implica, por lo tanto, respetarnos a nosotros mismos, y también ayudar a los demás a hacerlo. La autoestima es el requisito indispensable para unas relaciones interpersonales.
La autoestima debe ser equilibrada
Cuando hablamos de este valor, no podemos mal interpretar el concepto, ya que podemos caer en desequilibrios y podemos creernos más que los demás, dejando como resultado el daño de la gente que me rodea. Hay algunas causas del desequilibrio en cuanto a la autoestima, por ejemplo:
CREENCIAS: Inadecuadas sobre cómo debemos ser.
AUTOEXIGENCIA: escala de requerimientos personales muy Altos.
DESCALIFICACIONES: desvalorización de aptitudes, habilidades y talentos personales.
DIÁLOGOS INTERNOS NEGATIVOS (Me creo menos que los demás).
EMOCIONES NEGATIVAS (los pensamientos negativos Provocan emociones negativas- Rabia y tristeza.
¿Cómo saber si tengo una autoestima muy baja?
Existen algunas características que distinguen a las personas con baja autoestima: Son indecisos, se le dificulta tomar decisiones, tienen miedo exagerado a equivocarse. Solo toman una decisión cuando tienen seguridad 100 % de que tendrán éxito.
Piensan que no pueden, que no saben nada. No valoran sus talentos. Miran sus talentos pequeños, y los de los otros los ven grandes
Son muy ansiosos y nerviosos, lo que los lleva a evadir situaciones que le dan angustia y terror. Muy pasivos, evitan tomar la iniciativa. Son aislados y casi no tienen amigos.
No les gusta compartir con las demás personas. Evitan participar en actividades donde él sea el centro atención. Manejan mucho sentimiento de culpa cuando algo sale mal. Creen que son feos. Creen que son ignorantes.
Se alegran antes los errores de otros (que otro sienta lo mismo que él). Dependen mucho de otras personas para hacer sus tareas o realizar cualquier actividad. No están satisfechas consigo mismas, piensan que no hacen nada bien.
No conocen sus emociones por lo que no pueden expresarlas. No se preocupan por su estado de salud. Son pesimistas. ¡Todo va a salir mal! Cree que él o ella es una persona poco interesante. Cree que causa mala impresión a los demás. No le gusta esforzarse. Siente que no controla su vida.
¿Cómo saber si tengo una autoestima muy alta?
Las señales más visibles en este tipo de personas son: Piensan que pueden hacerlo todo, no hay nadie mejor que ellos. Creen tener siempre la razón y que no se equivocan.
Son seguros de sí mismos en extremo, pero los hace no ver los riesgos de sus acciones. Creen que todas las personas los aman.
Hablan en extremo y son escandalosos. No toman en cuenta a nadie para hacer sus tareas o realizar cualquier actividad.
Por lo regular la gente los rechaza por SABELOTODO. Se aman en forma enfermiza a sí mismos. Me siento atractivo (No necesariamente en el aspecto físico).
Creen que son las personas más interesantes en la tierra. Cree que le gana a cualquiera en todo. Cree que es el cuerpo más bello.
Cree que impacta a cualquiera que lo conoce. Le gusta que lo elogien. Cree que todas las personas están obligadas a amarlos.
Soy mi mejor amigo. Cree que nunca se equivoca, pero ataca a los demás cuando se equivocan. Cuida en forma enfermiza su salud. Quiere tener lo mejor en ropa, perfume, y objetos materiales,
La autoestima desde el punto Bíblico
La Biblia dice que tenemos un grande valor para nuestro Dios (Jesucristo), ese valor se dio a conocer el día que nuestro Señor murió por nosotros en la cruz del calvario.
Por eso dice el salmo 49, 7-8: “Ninguno de ellos podrá en manera alguna redimir al hermano, Ni dar a Dios su rescate (Porque la redención de su vida es de gran precio Y no se logrará jamás)”.
Es decir, no había dinero que nos pudiera rescatar del pecado. Cuando dice que no había dinero suficiente para rescatarnos, significa que todo el dinero del mundo no alcanza para comprar nuestra vida (Somos de gran valor). Y solo Cristo fue capaz de pagar con su vida nuestro rescate.
La Biblia muestra que para Dios somos de gran valor “Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve”: Malaquías 3, 17.
Por tal razón, si te has sentido en algún momento menos que los demás, te animo a sigas adelante, que Dios tiene cosas muy especiales para ti y los tuyos (Tu vales mucho para Dios).
Por otro lado, podemos darnos cuenta que el concepto de nosotros mismos debe ser equilibrado, sabiendo que si está muy elevado podemos humillar a los que estén a nuestro alrededor, y si tenemos nuestro autoconcepto muy bajo nos hacemos daño a nosotros mismos. Por eso dice:
“Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí CON CORDURA, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función”: Romanos 12, 3-4.
Pensar de sí mismo con condura significa, no creernos superior a los demás, pero tampoco inferiores. Recuerda Dios derrama su misericordia sobre todos.
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