Los cargos y la pena que podría pagar Jack Teixeira por filtración de documentos
Jack Teixeira, el joven sospechoso de estar detrás de una de las mayores filtraciones de documentos del Pentágono en la última década, fue imputado por dos delitos este viernes al comparecer ante el juez magistrado de la Corte de Distrito de Massachusetts, David Hennessy.
Jack Teixeira fue arrestado el jueves luego de una investigación de una semana sobre una de las filtraciones de información confidencial más dañinas desde la divulgación de documentos de la Agencia de Seguridad Nacional en 2013 por parte de Edward Snowden.
Los cargos en su contra
En una breve audiencia ante un tribunal federal en Boston, el joven fue acusado de “retención y transmisión no autorizadas de información de defensa nacional”, así como de “sustracción y retención no autorizada de documentos o material clasificado”.
Teixeira compareció ante un juez de la corte federal de Massachusetts en Boston a las 10:00 am, hora local. No estaba obligado a declararse culpable y quedó detenido en espera de una nueva audiencia programada para el próximo miércoles.
Teixeira es sospechoso de publicar una serie de documentos secretos del Pentágono, algunos fechados a principios de marzo, en un grupo de chat privado en la red social Discord.
La fuga de documentos secretos reveló la inquietud de Washington sobre las debilidades del ejército de Ucrania y señaló que Estados Unidos está espiando a sus aliados, incluidos Israel y Corea del Sur.
Uno de los documentos, de hecho, contenía información sobre el “estado del conflicto de Rusia-Ucrania, incluyendo el movimiento de tropas en una fecha particular”.
El diario The New York Times informó que Teixeira era el líder de un grupo llamado Thug Shaker Central y, según los informes, publicó los documentos bajo el apodo de “OG”.
Primero transcribió el contenido de los documentos clasificados para compartir con el grupo, pero luego los fotografió y les dijo a otros miembros que no los compartieran, según el Washington Post.
Algunos de los documentos aparecieron más tarde en otros sitios de internet, incluidos Twitter, 4Chan y Telegram.
De ser hallado culpable, podría afrontar una pena máxima de 15 años de cárcel.
En una declaración jurada presentada ante la corte por investigadores del FBI, se asegura que Teixeira tenía desde 2022 una acreditación que lo autorizaba a acceder a material marcado como de máximo secreto.
¿Quién es Alex Teixeira?
Los investigadores aún no dieron indicios del motivo de Teixeira para divulgar los documentos.
El joven se alistó en la Guardia Nacional Aérea en septiembre de 2019 y es un especialista en tecnologías de la información y comunicaciones que alcanzó el rango de aviador de primera clase, el tercero más bajo para el personal de la fuerza aérea alistado.
Los amigos de Teixeira lo describieron al diario The Washington Post como un católico devoto y un libertario interesado en las armas.
El periódico informó que proviene de una familia con décadas de servicio militar. Su padre pasó 34 años en la misma unidad militar que su hijo, mientras que la madre de Teixeira trabajaba para organizaciones sin fines de lucro que apoyan a los veteranos.
| URGENTE: El FBI arrestó al filtrador de documentos clasificados Jack Teixeira, un miembro de la Guardia Nacional Aérea del Ejército de EE. UU. de Massachusetts de 21 años que compartió los materiales en Discord. pic.twitter.com/G2BisB58Bj
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) April 13, 2023
Según The New York Times, el joven no estaba motivado por su disconformidad con las acciones del Gobierno estadounidense, como ha sido el caso de anteriores filtraciones (WikiLeaks, los Papeles del Pentágono), y aunque revelan información sensible sobre la guerra de Ucrania, no parece que Teixeira tomara parte en el conflicto.
Miembros del grupo de Discord donde el sospechoso supuestamente filtró los documentos dijeron al periódico que las publicaciones eran “puramente informativas”.
Con todo, las filtraciones muestran detalles comprometedores de la estrategia ucraniana, y arrojan luz también sobre el espionaje de Estados Unidos a sus propios aliados, como Corea del Sur o Israel.
El foro estaba dedicado a discutir sobre videojuegos y armas de fuego, y en él se compartían con frecuencia “memes” racistas, según medios estadounidenses.
Al parecer, Teixeria se llevaba a casa documentos en papel de la base militar en la que trabajaba y los fotografiaba. Después compartía estas fotografías en el grupo virtual, en el que participan entre 20 y 30 personas, algunos adolescentes.
Su madre, hablando con The New York Times, confirmó que el joven había estado trabajando en el turno nocturno en una base de Cape Cod, y que recientemente había cambiado su número de teléfono.
En videos a los que ha tenido acceso The Washington Post se ve al chico practicando tiro con un rifle mientras grita insultos racistas y antisemitas. Cuando el FBI registró la casa de Teixeira encontró varias armas de fuego.
Las dudas en el caso
El caso ha despertado dudas sobre cómo un joven que llevaba poco tiempo trabajando para el Pentágono ha podido tener acceso a material tan sensible.
El Pentágono considera la filtración de los documentos como un “acto criminal deliberado”, pero no ha explicado cómo un joven que lleva poco más de tres años en la Guardia Nacional de Massachusetts ha podido acceder a información clasificada que compromete a los aliados de Estados Unidos y dan detalles sobre los planes de Estados Unidos y la Otán para reforzar la ofensiva antirusa en Ucrania.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, informó que ordenó una revisión de los “procedimientos de acceso, responsabilidad y control de inteligencia” dentro del Pentágono en pro de “evitar que este tipo de incidente vuelva a ocurrir”.
El arresto de Teixeira el jueves en su casa en la localidad de North Dighton, en el sur del estado de Massachusetts, fue transmitido en vivo por las cadenas de televisión estadounidenses.
Las imágenes aéreas de la operación mostraron al sospechoso, vestido con pantalones cortos rojos y una camiseta, con las manos detrás de la cabeza, retrocediendo lentamente hacia los efectivos con ropa de camuflaje y fuertemente armados que lo detuvieron.