Día de los Difuntos en Colombia: origen, y por qué se celebra
Colombia. El 02 de noviembre se lleva a cabo la conmemoración del día de los fieles difuntos, fecha utilizada por los seres queridos de las personas que ya fallecieron y según la tradición, para llevar arreglos florales, velas y demás ofrendas a las tumbas de sus parientes.
El día de los Fieles Difuntos tiene como principal objetivo rendir tributo a las personas que fallecieron y que se encuentran siendo purificadas en el purgatorio antes de poder llegar al cielo, según las creencias del catolicismo.
Origen del Día de los Santos Difuntos
La celebración de los Santos Difuntos procede de la tradición católica, la cual fue impuesta en el territorio latinoamericano una vez se dio la llegada de las colonias españolas conquistadoras. Para los españoles, varios de los rituales y creencias de las comunidades indígenas que habitaban América, se consideraban como morbosas, místicas y extrañas ante los ojos del catolicismo, razón por la cual se dio inicio al proceso de evangelización de los nativos a través de la imposición de celebraciones como el Día de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos.
Hay que recordar que el proceso de descubrimiento de nuevas tierras por parte de los conquistadores españoles, era realizado en nombre de Dios y del Rey; por esa razón, dentro de la instalación de colonias europeas era fundamental erradicar los rituales ajenos a sus creencias.
No obstante, a pesar de las imposiciones de la cultura española, con el pasar del tiempo se fueron conservando algunos aspectos propios de los pueblos nativos en medio de estas celebraciones. Según se ha podido conocer, los indígenas Arahuacos y otros grupos prehispánicos usaban los cráneos de los fallecidos como trofeos en su honor; tradición similar a lo que se realiza actualmente en la cultura mexicana, en donde en medio de la festividad del Día de Muertos, se destaca la calavera como su principal símbolo.
¿Por qué se celebra el 02 de noviembre?
El origen de la celebración del Día de los Santos Difuntos tuvo escenario el 2 de noviembre del año 998, cuando se tomó la decisión de instaurar una fecha especial para elevar oraciones y homenajes a los fieles del catolicismo que fallecieron y se encuentran pagando sus penas en el purgatorio. Puntualmente, el encargado de dar inicio a la tradición fue el monje benedictino San Odilón de Francia, quien expandió el ideal en Roma en el siglo XVI y a partir de allí se extendió por todas las colonias españolas que se impusieron en el mundo.
