Israel anunció “completo asedio” en la Franja de Gaza tras recuperar el control en el sur del país

El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, dio instrucciones el lunes para implementar un bloqueo total en la Franja de Gaza, en respuesta a los enfrentamientos que han estado ocurriendo durante los últimos tres días después de que el grupo palestino Hamás iniciara una ofensiva militar desde ese territorio.

“Estamos imponiendo un asedio total a Gaza (…) ni electricidad, ni comida, ni agua, ni gas, todo cerrado”, dijo Gallant en un video, refiriéndose a la población de este enclave palestino, habitado por 2,3 millones de personas.

“Estamos combatiendo contra animales y actuamos en consecuencia”, agregó Gallant.

Desde el inicio de la ofensiva de Hamás el pasado sábado, más de 700 ciudadanos israelíes han perdido la vida en el sur de Israel. Hamás logró infiltrar a cientos de milicianos por tierra, mar y aire. En el primer día de los enfrentamientos, los islamistas asesinaron a aproximadamente 250 personas que se encontraban en un festival de música cerca del enclave, según la organización Zaka, que colaboró en las operaciones de recuperación de los cuerpos. En la Franja de Gaza, los bombardeos israelíes causaron la muerte de al menos 493 palestinos, según el recuento más reciente de las autoridades locales.

Por otro lado, el ejército israelí anunció este lunes que había recuperado el control de las localidades del sur del país que habían sido atacadas por Hamás cerca de la Franja de Gaza. Esta acción se llevó a cabo en respuesta a la ofensiva sin precedentes del grupo islamista palestino. En el tercer día de este ataque, que Israel comparó con los atentados en Estados Unidos del 11 de septiembre de 2001, el ejército afirmó que tenía “control” sobre las localidades del sur donde había habido infiltrados de Hamás, aunque reconoció la posibilidad de que todavía hubiera terroristas en la zona, según un portavoz militar.

El balance actualizado del ejército reporta que más de 700 israelíes han perdido la vida en el ataque y 2.150 resultaron heridos. En el lado palestino, se estima que 436 personas han fallecido, según las últimas cifras proporcionadas por las autoridades locales.

Como resultado de estos acontecimientos, se ha desplegado un gran número de soldados israelíes cerca de la Franja de Gaza, un territorio empobrecido con 2,3 millones de habitantes, que ha estado bajo el control de Hamás desde 2007. El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, ordenó un “asedio completo” del enclave palestino.

“Estamos imponiendo un asedio total a Gaza (…) ni electricidad, ni comida, ni agua, ni gas, todo cerrado”, dijo Gallant en un video.

“Estamos combatiendo contra animales”, agregó Gallant.

En el interior del pequeño territorio, más de 123.000 personas se han visto obligadas a dejar sus casas, indicó el lunes la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

Tanto civiles como militares son rehenes

El ejército israelí concentra también sus esfuerzos en salvar a los ciudadanos secuestrados por Hamás, más de un centenar, según el gobierno, algo que nunca había sucedido en la historia del país.

“Lo que pasó no tiene precedentes en Israel”, reconoció el primer ministro, Benjamin Netanyahu.

Según el ejército israelí, participaron en “la invasión de Israel” un millar de combatientes de Hamás, afirmó un portavoz en X (ex-Twitter).

“Civiles y soldados están en manos del enemigo, son tiempos de guerra”, afirmó el general en jefe del ejército israelí, Herzi Halevi.

El ex primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a la población israelí a prepararse para una guerra prolongada y complicada, mientras que el ejército anunció planes para evacuar a todos los residentes de áreas cercanas a la Franja de Gaza.

En Jerusalén, se activaron sirenas de alerta de misiles el lunes alrededor del mediodía, seguidas rápidamente por varias explosiones, según informaron periodistas de AFP en la ciudad.

En relación a las víctimas, varios ciudadanos de otros países, incluyendo algunos con doble nacionalidad israelí, perdieron la vida durante la ofensiva, como 12 tailandeses, 10 nepalíes y cuatro estadounidenses. Además, se reporta que al menos tres brasileños están desaparecidos y uno ha sido hospitalizado, según información proporcionada por el gobierno.

Un portavoz del ejército israelí describió este ataque como “de lejos el peor día en la historia de Israel”, comparándolo con eventos como el 11 de septiembre y el ataque a Pearl Harbor. Jonathan Panikoff, director de la iniciativa Scowcroft para la seguridad en Oriente Medio, señaló que “Israel fue sorprendido por este ataque sin precedentes” y que “muchos israelíes no comprenden cómo pudo haber ocurrido”.

¿El sistema fracasó?

Para Yaakov Shoshani, de 70 años, habitante de la ciudad israelí de Sederot, cerca de la Franja de Gaza, “todos los sistemas fracasaron, ya sea los servicios de información, de inteligencia militar, civil, los sistemas de detección, la valla fronteriza, todo fracasó”.

El ataque de Hamás fue condenado por numerosos países occidentales y Estados Unidos empezó el domingo a enviar ayuda militar a Israel y a dirigir hacia el Mediterráneo a su portaaviones “USS Gerald Ford”.

China condenó el lunes cualquier acción que atente contra los civiles y abogó por un alto el fuego. También Rusia y la Liga Árabe, que rechaza la violencia “de ambos lados”, dijeron que trabajarán para “poner fin al derramamiento de sangre”.

Y la Unión Europea (UE) convocó para el martes una reunión de cancilleres de emergencia.

Irán, que mantiene relaciones estrechas con Hamás y fue uno de los primeros países en aplaudir la ofensiva del grupo islamista, rechazó las acusaciones sobre su papel en la operación y dijo que “se basan en motivos políticos”.

Israel, que ocupa Cisjordania desde 1967, anexionó la parte oriental de Jerusalén e impone un bloqueo a Gaza desde que Hamás tomó el poder en el enclave en 2007.