En esta zona del departamento, donde el agua está en todos los rincones, es muy difícil saber cómo será el día para los niños que se enfrentan al peligro de atravesar caños y ciénagas para llegar hasta los centros de educación.
La mayoría de ocasiones los niños hacen el recorrido en canoas artesanales, franqueando improvisados puentes de madera en mal estado y cuando no hay de otra, amarrados con cabuyas unos a otros caminando entre las corrientes para no ser arrastrados.
LA ODISEA DE ESTUDIANTES EN LA MOJANA
Dos menores de edad por poco perecen en las aguas del Caño Rabón, zona rural de Majagual (Sucre), cuando colapsó un puente de madera que utilizan para ir al colegio y regresar a sus casas. Es el drama de los estudiantes en la región Mojana. pic.twitter.com/vcXF6huPM8
— Francisco javier barrios yepes (@barrios_ye2216) July 25, 2024
Para ellos lo importante es llegar al colegio. Lo hacen con el deseo de aprender, de superarse y tratar de conseguir un mejor porvenir, aunque lo hagan exponiendo sus vidas.
La época de invierno para las familias de La Mojana es la más difícil. Los pueblos se inundan, los cultivos y los animales se pierden, los caminos se dañan, hay miseria en la región.
Los niños que viven en las veredas y corregimientos de Majagual, Sucre (Sucre) y Guaranda, en la región de La Mojana se ven perjudicados. Los colegios son cerrados y cuando siguen funcionando se presentan dramas para llegar hasta las Instituciones Educativas.
Utilizan puentes improvisados
En esta ocasión a los niños del corregimiento de Sincelejito les tocó utilizar un angosto puente de madera para ir y regresar a sus casas. Son maderas que el agua ha afectado y se tornan resbaladizas.
En ese cruce los niños cayeron a las aguas del Caño Rabón al colapsar el improvisado puente y como pudieron se agarraron a un pequeño monte que se había hecho en medio del canal.
Estaban cerca de los ranchos y la comunidad se percató de la situación. Varios hombres se lanzaron al agua para auxiliarlos y llevados en los hombros pudieron salir a la orilla, cuando además les lanzaron una cuerda.
Los menores de edad lucían los uniformes del colegio, con los bolsos y utensilios de estudiantes, los cuales se hundieron en el caño.
Los niños hoy pudieron salvar sus vidas, mañana no se sabe cómo será la situación.
“Le pedimos a las autoridades la intervención para la construcción de un puente seguro que permita la llegada de los estudiantes a su lugar de estudio”, solicita el veedor ciudadano, John Jairo Blanquiceth.
Este líder social señala además que toda la zona se encuentra afectada por el rompimiento del sector en cara de gato, por la fuerza del río Cauca.
“Todos estos caños están rebozados de agua y con mucha corriente, lo que pone en peligro a diario la llegada de los estudiantes a los establecimientos educativos”, precisó.
En la subregión Mojana y en el mismo San Jorge, varios son los colegios que se encuentran bajo las aguas y los estudiantes se quedan sin recibir una buena educación.