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Opinión

El suicidio como problema de salud pública


Por: Asociacion Niños De Papel

El suicidio es el acto de quitarse deliberadamente la vida, es muerte que ocurre cuando alguien quiere terminar con su vida, mientras que un intento de suicidio se daña así mismo para tratar de terminar con su vida. El suicidio no discrimina a todos en algún momento nos puede tocar por igual y es un hecho sumamente triste y lamentable. Es extremadamente doloroso para las familias, los amigos que quedan y que no encuentran razones de lo que ha sucedido.

Cada año ocurren más de 700.000 muertes por suicidio en el mundo, por cada suicidio consumado hay muchas tentativas de suicidio. En la población general, un intento de suicidio no consumado es el factor individual de riesgo más importante y es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 19 años según informa la OMS (Organización Mundial De La Salud), y cada de ellos es una tragedia que tiene repercusiones a nivel social, familiar y comunitario. En el boletín epidemiológico del Instituto Nacional De Salud se informa que hasta la semana 27 en el departamento de Córdoba hay acumulados 433 intentos de suicidio es decir 75 más que en la misma semana del 2020.

Se estima que alrededor de un 20% de los suicidios se cometen por autointoxicación con plaguicidas, la mayoría de ellos en zonas rurales agrícolas de países de ingresos bajos y medianos. Otros métodos comunes son el ahorcamiento y los disparos con armas de fuego (OMS).

Actualmente el suicidio es un importante problema de salud pública y según los datos anteriores cada año va en aumento y es una problemática que no se puede seguir pasando por alto. Es posible prevenir los suicidios adoptando medidas en la población general, de determinados grupos e individuos, sin embargo, la inversión pública para concientizar y prevenir la conducta suicida es realmente escasa en las poblaciones de riesgo que son aquellos grupos que tienen más riesgos de presentar una conducta suicida ya que presentan desventajas ya sea por la edad, sexo, estado civil, nivel educativo, situación o condición física y mental y que requieren de un esfuerzo adicional para incorporarse al desarrollo y la convivencia.

Dentro de este grupo poblacional de riesgo también podemos incluir las personas con discapacidad, mujeres, niños, niñas y adolescentes, personas con enfermedades mentales o con el Virus del VIH y/o que han desarrollado el SIDA, migrantes, refugiados o personas con diversidad sexual e identidad de género.

El suicidio es un problema de salud pública importante, pero a menudo descuidado, rodeado de estigmas y tabúes. El abordar la complejidad de las conductas suicidas comienza por identificar los factores de riesgo y de protección, los factores de riesgo clave abarcan desde los sistemas sanitarios y la sociedad hasta los niveles comunitario, relacional e individual.

Mitigar los factores de riesgo para reducir los medios de suicidio y potenciar los factores de protección para fomentar la resiliencia, pueden reducir de manera eficaz las tasas de suicidio. Por ejemplo, el suicidio impulsivo puede prevenirse restringiendo el acceso a los medios letales. Sin embargo, la prevención del suicidio no se ha abordado adecuadamente en muchos países debido a la falta de toma de conciencia sobre el suicidio como un importante problema de salud pública, lo que impide que la gente busque ayuda, informa la OPS (Organización Panamericana De La Salud).

Actualmente los gobiernos deben tomarse enserio esta problemática e introducir políticas publicas orientadas a la reducción de la taza del suicidio en Colombia, así como la restricción del acceso a los medios más frecuentemente utilizados para el suicidio (por ejemplo, plaguicidas, armas de fuego y ciertos medicamentos), también se debe brindar información responsable en los medios masivos de comunicación; también es muy importante la capacitación del personal no especializado para así lograr una Identificación temprana, tratamiento y atención de personas con problemas de salud mental y abuso de sustancias, dolores crónicos y trastorno emocional agudo.

Empezar a reconocer el papel que juega los gobiernos como las comunidades en la puesta en práctica de acciones dirigidas a la prevención y que brinde una respuesta nacional integral a la prevención del suicidio.

Columnista: Andrés Flórez Padrón, psicólogo, especialista en Gestión de Procesos Psicosociales.

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