Cómo influyen las prendas de vestir en nuestra salud mental
Nuestra salud mental está determinada por factores internos y externos. La OMS la define como un “estado de completo bienestar físico, mental y social“. La salud mental entendida como un estado de bienestar es la encargada de permitirnos desempeñar nuestras actividades de forma eficiente y productiva permitiéndonos así lograr nuestras metas y aportar a nuestro entorno.
Cada día es más frecuente ver que nuestra salud mental se vea afectada por factores externos. La pandemia es un factor que ha venido afectando la salud mental de la población de todas las edades. Es nuestra responsabilidad promover entornos de vida saludables que nos permitan desarrollar nuestras actividades diarias de manera óptima y productiva.
Las redes de apoyo social y familiares son fundamental para mantener nuestra salud mental sana y en equilibrio. Un estilo de vida saludable que incluya ejercitarte, hacer yoga o desarrollar actividades al aire libre nos permiten soltar esas cargas que nos llenan de angustia y no nos dejan avanzar.
Es fundamental promover prácticas familiares en pro de hábitos de vida saludables, leer, hacer caminatas, organizar nuestros espacios, son actividades liberadoras que podemos disfrutar en familia y mejoran nuestra calidad de vida.
Nuestro armario funciona como nuestro baúl de los recuerdos, inconscientemente guardamos memorias, sentimientos, culpas que nos llevan a acumular prendas que de forma inconsciente afectan nuestra salud mental. Para ello debemos hacer un detox de nuestro armario para identificar lo que conecta con nuestra esencia, con nuestro estilo de vida y lo que nos hace felices.
La ropa y los colores son elementos que además de suplir la necesidad de vestir nuestro cuerpo puede usarse como terapia si hacemos un análisis previo de nuestro estilo de vida actual. Con lo que tenemos en el armario podemos identificar las prendas que nos hacen sentir bien y las que por el contrario nos traen sentimientos de frustración o tristeza.
En términos generales detenernos y hacer un análisis de cada prenda, material y color, es una terapia en sí cuando vemos que hay algo que ya no usamos y podemos donarlo, nuestro estado de ánimo cambia. El color tiene un impacto psicológico en nuestra vida, la razón por la cual cuando estamos felices elegimos colores alegres y viceversa cuando estamos bajas de ánimo usamos colores oscuros y fríos.
La prendas de vestir; los colores y texturas nos permiten expresar quienes somos; nos ayudan a sentirnos mejor física y emocionalmente debido a que su influencia en el ámbito psicológico influye en nuestra forma de sentir pensar y actuar.
A su vez, los colores hablan de nuestra personalidad, transmiten mensajes que construyen una imagen de nosotros sin necesidad de decir una palabra. Van ligados a nuestro estilo.
Vestirnos cada día es un acto de amor propio; por eso la importancia de elegir de manera consiente que usaremos acorde a nuestras actividades diarias nos va a permitir tener un día productivo, exitoso o tranquilo.
Está demostrado que las prendas con estructura y tejidos pesados nos hacen sentir más seguros, proyectan una imagen de poder y éxito mientras que la prendas en tejidos suaves y cómodos nos hace sentir tranquilos, en modo relax, proyectando una imagen de serenidad y confort.
Para ello, existen expertos que nos pueden ayudar a identificar qué área de nuestra vida está afectando la salud mental y cómo con elementos cotidianos como las prendas y colores que usamos podemos transformar nuestra mente.
Angélica Carvajal
Diseñadora industrial, bogotana. Consultora Internacional de imagen y marca. Personal shopper. Empresaria fundadora y creativa de @divina_tentacion_oficial. Creadora de contenido digital de moda y estilo. Con mas de 10 años de experiencia en el sector de retail y empresas de moda.