Un sacerdote le disparó a un policía en el corazón mientras consumían licor

Un nuevo caso de intolerancia se registró en la noche del 1.º de mayo en Bogotá, cuando un sacerdote, al parecer, le disparó en el corazón a un policía con el que bebía unos tragos en la casa cural de la iglesia del barrio Juan Rey.
Las primeras versiones indican que el policía herido llegó con uno de sus compañeros a la parroquia y allí se reunió con los clérigos Miguel Ángel González Joya y Frank Castro Guzmán.
Los cuatro, según ha trascendido, consumieron licor. Poco después, vecinos del barrio informaron que se oyeron varios tiros en la casa cural. Quien habría disparado fue uno de los sacerdotes.
Aunque los dos religiosos fueron capturados en flagrancia, quedaron en libertad por errores en el informe de la Policía a la hora de la judicialización. El reporte no decía que habían ingresado a la casa cural.
Según el parte médico, el subintendente tiene un trauma cardiaco severo y su pronóstico es reservado. Nos se sabe si el sacerdote señalado de dispararle a un policía habría usado el arma de alguno de los uniformados. Todo es materia de investigación.
El juez declaró ilegalidad de la captura, porque hubo registro de inmueble y no se comunicó de esta situación en el informe de captura en flagrancia por parte de los policías. Por lo anterior el juez dio libertad y no se pudo realizar la imputación.