La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) anunció una medida significativa que impactaría positivamente a los usuarios de Nequi y DaviPlata, las dos billeteras digitales más populares en el país, operadas por Grupo Bancolombia y Grupo Davivienda, respectivamente.
Según reveló el director de la entidad, Luis Carlos Reyes, el gravamen del 4×1000 aplicable a transacciones significativas será eliminado a partir de diciembre de este año. Esta decisión, que responde al contenido del artículo 65 de la ley 2277, parte de la reforma tributaria del 2022.
El 4×1000
Este impuesto –que no ha sido bien recibido por los colombianos desde la implementación del 2×1000 a través del decreto 2331 del 16 de noviembre de 1998– estipula que las arcas del Estado recibirán parte del dinero de las transferencias bancarias. En los últimos años, con el incremento de plataformas digitales, los movimientos de dinero por aplicaciones también estaban implicados en el impuesto.
Según una explicación de BBVA, “El 4 x 1000 es un impuesto del Gobierno Nacional en el que por cada 1.000 pesos en algún tipo de movimiento financiero, hay que pagar cuatro pesos. Este gravamen es recaudado por los bancos y luego girado al Gobierno, con algunas excepciones”.
Esta manera de captar dinero por parte de las entidades del Estado ha resultado conveniente. Según Alejandro Reyes, un economista de la entidad bancaria, “los bancos, como administradores del dinero que confían las personas, llevan registros de cada peso que las personas mueven y eso le da confianza al Gobierno de no recibir dinero corrupto”.
Otras excepciones del impuesto, según director de la Dian
Luis Carlos Reyes también anunció una importante modificación en el cobro del impuesto para exonerar a un amplio sector de la población colombiana de este gravamen.
El director de la Dian explicó que las personas cuyas transacciones financieras no superen los 16.4 millones de pesos entre todas sus cuentas quedarán liberadas del pago de este impuesto.
Nequi y Daviplata
Dentro de una gama de plataformas que funcionan como bolsillos digitales, estas dos han sido conocidas por sus facilidades para realizar operaciones como transferencias instantáneas y pago de facturas sin la necesidad de acudir a una sucursal bancaria, incluso, sin contar con cuentas bancarias.
Una buena parte de la población colombiana se ha beneficiado de las plataformas, como lo señaló un análisis de la firma Inmark, al menos el 14% de los ciudadanos que tienen cuentas bancarias usan las plataformas.
“Aunque la mayoría de los colombianos (53,9%) sigue siendo cliente exclusivo de los bancos tradicionales, ya el 13,9% de las personas naturales bancarizadas en Colombia operan solo con entidades digitales (sobre todo billeteras digitales) y hasta un 32,2% tienen productos y servicios tanto con bancos como con entidades digitales”, detalló el estudio.
En este también se añadió que el “51,8% de los entrevistados mencionaron ser usuarios de Bancolombia; el 37,2% de Nequi; el 22,5% de Davivienda; y el 17,6% de Daviplata”, como arrojó el análisis.
Su popularidad ha sido particularmente notable entre la población joven y los no bancarizados, gracias a la facilidad y accesibilidad de sus servicios. “Las entidades financieras y/o cooperativas de naturaleza financiera o de ahorro y crédito vigiladas por las Superintendencias Financiera o de Economía Solidaria que administren o en las que se abran cuentas de ahorro, depósitos electrónicos o tarjetas prepago… deberán adoptar un sistema de información que permita la verificación, control y retención del Gravamen a los Movimientos Financieros… sin la necesidad de marcar una única cuenta”, se expresó. en la reforma tributaria.
Este cambio legislativo es crucial ya que el cobro del 4×1000 había generado cierta controversia y descontento entre los usuarios de estas plataformas. La exención de este gravamen, aplicable hasta trescientos cincuenta (350) UVT mensuales, facilitará aún más la gestión económica digital de los colombianos, promoviendo la inclusión financiera y simplificando las operaciones diarias.
