Zenu Digital

El peso de la gloria

Te prepara para lo grande

Por Johana Peláez Velásquez  

Nada sucede por accidente, por eso algunas veces la vida nos presenta grandes pruebas antes de recibir bendiciones y aunque en el camino nos encontremos con decepciones, retrasos, desvíos o adversidades, todos estos desafíos surgen para que permanezcamos en la fe y reconózcanos las oportunidades en cada etapa del proceso. Te ha pasado que sientes que tus deseos nunca se cumplirán, que todos tus esfuerzos son en vano, sientes que nada cambiara o, tal vez has considerado que no tienes la capacidad para hacer realidad todos los sueños por los cuales has luchado tanto. Cuando llegan este tipo de pensamientos, no nos damos cuenta de la importancia de disfrutar el proceso que vivimos diariamente y que necesitamos afrontar todas esas amargas experiencias para estar muy bien preparados antes de alcanzar la tan anhela gloria.

Tal vez este tipo de circunstancias nos pueden generar una sensación de asombro, porque sabemos que todo ocurrirá de manera inesperada, confusión porque creemos que existe un desorden y no hay claridad frente a una cosa o persona, desamparo porque sentimos que no recibimos la ayuda o protección que necesitamos e incertidumbre porque consideramos que no hay una seguridad de que algo sucederá.

Si algunos de estos argumentos resuenan contigo o con alguna persona cercana a ti, es importante que sepas que estas interpretaciones son exclusivas de la persona que lo siente. También es posible que a nivel emocional estas condiciones puedan estar generando cualquiera de las siguientes emociones; añoranza, contrariedad, desconfianza, euforia, fortaleza, impaciencia, miedo, optimismo, paciencia, resiliencia, sorpresa, temor, vacío.  

Mi invitación para hoy es que reflexiones acerca de la situación que vives actualmente y aprendas a identificar las oportunidades de aprendizajes que este tipo de experiencias quieren regalarte para que identifiques las lecciones de vida que están antecediendo tu tiempo de gloria. También necesito que sepas que Dios quiere que todos los seres humanos vivamos con gozo, paz, tranquilidad y alegría, pero si tu dejas entrar lo negativo a tu vida pones todo lo maravilloso por fuera, ya que el espacio que le das a lo positivo en tu mente es muy limitado o nulo.

Esto me mueve a preguntarte ¿Qué asuntos te genera angustia y no te permite ver el lado positivo de tu circunstancia?

Lo primero que necesitamos comprender es que la angustia es una respuesta a una situación que anticipamos como peligrosa. Es decir, que percibimos amenazas que no están en el presente, pero que damos casi por supuesto que surgirán en el futuro. Ahora el problema se agranda cuando nuestra mente pierde el control de la circunstancia que vivimos y retroalimentamos nuestros propios miedos con preocupación excesiva, temor o con angustia extrema. Por eso cuando aparece un hecho o persona que nos provoca angustia, se va perdiendo la ilusión de encontrar la tranquilidad que tanto deseamos tener, sentimos que no disfrutamos nada y la mente está continuamente enfrascada en pensamientos que en la mayoría de las ocasiones son catastróficos o repetitivos. Un sencillo ejemplo de algo que nos puede generar angustia es el miedo a las ratas, imagínate que sientes un pánico atroz por ellas. Sin embargo, en un momento dado podrías creer que pueden estar en casi cualquier sitio: al coger la ropa o al ir a la bañera.

Una de las emociones que se convierte en el enemigo para no resistir el peso de la gloria es la ansiedad, ya que cuando lo sentimos, estamos propensos a ser personas que tendemos a sentirnos intranquilos, nos aislados, nos preocupamos por cosas diminutas y creemos que ya no somos los mismos de antes porque que estamos perdiendo el control de la vida. A esto se le suman afecciones en el sistema límbico, el tallo cerebral y el del córtex superior, también se evidencia el aumento del cortisol en sangre, haciendo que estas estructuras trabajen a otro ritmo y consiguen, por ejemplo, que no podamos tomar decisiones con claridad, que nos cueste concentrarnos y que la memoria falle.

Mi recomendación es buscar apoyo profesional de un coach, psicólogo o terapeuta, de acuerdo al caso de cada persona, para identificar el tipo de proceso que necesitan iniciar. También es importante tratar de comprender y/o interpretar los pensamientos, juicios y emociones que están moldeando a la persona que vive esta experiencia, para acompañarlo a hacerse responsable de la situación que vive y promover el desarrollo de una autoestima sana.

Hay una frase de Facundo Cabral que dice: Libérate de la ansiedad, piensa que lo que debe ser será, y sucederá naturalmente” 

Por eso es importante aprender a gestionar nuestras emociones, a modular todos nuestros pensamientos, atender con prioridad aquellos asuntos que son relevantes y que necesitan ser atendidos con urgencia para permitirnos tener una vida llena de bienestar a nivel físico, mental, emocional, espiritual. También es necesario que sepas que la ansiedad es una reacción normal, pero que encierra muchos secretos, ya que cuando las personas lo experimentan no lo pasan nada bien y lo peor es que no se ven comprendidas por aquellos que no padecen este problema.

En este preciso instante quisiera que empieces a verte como una persona capaz de salir de la situación que hoy te angustia, enfocadoen encontrar la tranquilidad mental y dispuesto a enfrentar todos tus miedos con mucho amor y compasión.

Recuerda ¡eres víctima de tu propia mente!


  • Si estas listo para empezar tu propio de aprendizaje individual y necesitas de mi acompañamiento profesional nos vemos en sesiones de coaching individual

Te invito a que me sigas en todas mis redes sociales como @JohanaPelaezcoach para compartir experiencias.

Noticias relacionadas