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Opinión

En el Día Internacional de la Democracia, hablemos del Voto Suelto.

Por Jairo Aníbal Doria.

El 15 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Democracia, que fue establecido en 2008 por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) para recordar la adopción de la Declaración Universal de Democracia, realizada por la Unión Interparlamentaria, la cual tuvo lugar un día como este, pero de 1997.

El mensaje de la ONU este año fue “Empoderar a la próxima generación”, subrayando el papel esencial de la juventud en el futuro del progreso de la democracia, así como la necesidad de garantizar la inclusión de sus puntos de vista en las políticas que afectan profundamente a su mundo.

Pero, cuáles son esos puntos de vista?

En la última encuesta de opinión, que marca la intención de voto para la alcaldía de Montería (Centro Nacional de Consultoría en alianza con EL TIEMPO y CM&) un dato revelador ha salido a la luz: el 11% de los encuestados, a tan solo 45 días de las elecciones, aún no tiene claro por quién votará.

Esta cifra, que podría interpretarse como indecisión, va más allá; es un reflejo del desconocimiento generalizado acerca de quiénes son los candidatos y cuáles son sus propuestas para abordar los problemas sociales que afectan a nuestra región.

Las encuestas de opinión son una herramienta valiosa para comprender el pulso de la sociedad, especialmente en asuntos políticos, económicos y sociales. En este caso, el porcentaje de votantes indecisos pone de manifiesto que la información sobre los candidatos y sus plataformas aún no ha llegado de manera efectiva a una parte significativa de la población.

No es un secreto que la maquinaria electoral sigue teniendo un impacto en los resultados. Sin embargo, el voto suelto, que se hace más evidente en las ciudades principales donde la libertad de elección es menos restringida, merece nuestra atención.

Estos votantes no están comprometidos con ningún candidato ni color político en particular, lo que indica una apertura a nuevas ideas y un deseo de evaluar cuidadosamente las opciones disponibles.

Este 29 de octubre, cuando los ciudadanos que aún no han decidido su voto ejerzan su derecho, debemos recordar que a menudo están mejor informados que el votante promedio. Están al tanto de las coyunturas que marcan la agenda nacional y tienden a votar en función de sus emociones y convicciones.

El voto suelto es una oportunidad para la democracia, un llamado a los candidatos y partidos para que presenten propuestas claras y atractivas, y una invitación a todos nosotros a participar activamente en el proceso electoral.

La indecisión puede ser una señal de que los ciudadanos buscan algo más que lo tradicional, y es nuestro deber escuchar y responder a esta demanda por un cambio positivo.

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